¡Feliz Día Internacional del Beso! Hay que celebrar uno de los hechos más bonitos entre dos personas que se quieren. Pero en Buaala vamos a hacerlo de forma distinta recordando algunos besos de película…

“Bésame… Bésame mucho… Como si fuera esta noche la última vez…” ♫ Muy bien ya lo sabía el cantante Luis Miguel que besar es una de las acciones con más carga sentimental en las personas y es que un beso va mucho más allá de una unión física de dos labios distintos, se trata de una unión de emociones. ¿A quién no le gusta besar? ¿Y a quién no le gusta recibir un beso? ¡Celebremos que besar existe!

Cada año, el 13 de abril se dedica a celebrar el Día Internacional del Beso. Esta fecha surgió gracias al beso más largo de la historia, otorgado a una pareja tailandesa en 2011 al ganar un certamen besándose durante 46 horas, 24 minutos y 9 segundos. Sorprendentemente, la pareja volvió a batir su segundo récord en 2013 con un beso de 58 horas, 35 minutos y 58 segundos. Así pues, este maravilloso acto se conmemora anualmente este día en especial para recordar a las personas el placer y la fuerza sentimental asociadas al beso. Sin embargo, no hay que pensar solamente al beso en los labios y con la pareja, ya que no se especifica ni dónde ni a quién tiene que ser. Se trata de besos a padres, a hijos, a amigos, a abuelos, a parejas… hasta, por qué no, se puede repartir cariño a mascotas o desconocidos.

Es muy común conmemorar el Día Internacional del Beso recordando también los mejores besos de la historia, como el famoso beso entre un marinero y una enfermera al finalizar la Segunda Guerra Mundial. Así mismo, en el mundo del cine, es frecuente hacer memoria de los mejores besos de película. Pero esta vez en Buaala queremos hacer algo distinto. Los besos en el cine no son siempre tan perfectos como parecen, no siempre veremos un Noah y Allie bajo la lluvia en la pantalla. Hay veces en que la pasión entre dos personajes se rompe porque entre ellos no existe física ni química, o hay pasión entre ellos pero no queda bien en la pantalla o han habido declaraciones de los actores en que confesaban su afinidad casi inexistente. ¿Quieres conocer algunos de los peores besos de película?

  1. Luna Nueva (2009)

El beso que protagoniza una de las escenas más esperadas de la segunda entrega de la saga Crepúsculo es el primer ejemplo de torpeza en la gran pantalla. Si bien se esperaba algo apasionante y con fuerza emocional (que en parte así es ya que el significado del beso de Bella es salvar la vida de su amado), el cometido no se consigue al 100% gracias a la espléndida y bienvenida fuerza (nótese la ironía) del enamorado Edward. Seguro que la interpretación de esa escena requería que el actor se metiera en un papel de desesperación, dolor y tristeza y para eso ejerciera una fuerza más intensa de lo normal pero… querido Edward, ¡tampoco hacía falta pasarse! El bello significado de la secuencia se rompe al ver la nariz de Bella aplastada en su cara, mostrando en la pantalla un beso no muy cómodo de hacer. Una imagen nada atractiva para un acto totalmente hermoso.

 

  1. Dos tontos muy tontos (1994)

“Y esa fue la ultima vez que vimos a Mary”. Eso es lo que se nos viene a la cabeza al ver la pasmosa escena en que el bobo Harry se imagina besando a la sofisticada Mary, aunque más que besarla… parece que se la coma de un bocado. La estupidez del protagonista llega hasta los límites del amor. Un salón, una chimenea encendida, un vestido azul elegante, un buen traje, dos amantes, miradas de deseo… y un beso (si es que se le puede llamar así) que estropea todo romanticismo en la pantalla. A pesar de todo, el pensamiento de Harry sobre esa escena imaginada sigue siendo la de un beso apasionante, palpitante y conmovedor; dejaremos que siga pensando así. Suerte que se trata de una comedia en todos los aspectos… al menos esto justifica tal desmadre.

 

  1. Agua para elefantes (2011)

El esperado primer beso entre Jacob y Marlena tampoco es de lo más agraciado que la gran pantalla ha dejado ver. Escondidos y a oscuras, muy cerca y en silencio, lo que el espectador se espera es un beso apasionado que le ponga la piel de gallina… y lo que en realidad se encuentra son tres o cuatro piquitos que dejan mucho que desear. Más que quererse parece que les repela besarse. Además, los contratiempos no solo son presentes delante de las cámaras sino también detrás, ya que el mismo Robert Pattinson confesó su incomodidad en el rodaje ya que estaba resfriado y su nariz no paraba de gotear. Una escena igual de fría que el agua que seguramente les daban a los elefantes.

 

 

 

  1. Wanted (2008) 

A pesar de que la gran Angelina Jolie hay sido coronada como una de las actrices más atractivas del mundo de Hollywood, parece ser que no es tan buena en todo lo que hace. Si bien destaca en ofrecer grandes interpretaciones, estas se tambalean a la hora de besar. En este thriller de acción, Angelina besa de repente y sin escrúpulos a James, un hecho que deja al joven totalmente pasmado. La sensación que se genera en un principio en el espectador es pasión, pero puede que cambie de parecer al escuchar las declaraciones del actor posteriores al rodaje. Esta vez, el romanticismo de la escena se rompe con las palabras sinceras de James McAvoy, quien encarna al protagonista Wesley Gibson, sobre su supuesto apasionado beso con Fox, interpretada por Angelina Jolie. Sin irse por las ramas, el actor calificó el beso como “incómodo, sudoroso y no muy agradable”. Se nota que la sinceridad es un punto fuerte de James.

 

  1. Harry Potter y las reliquias de la muerte (Parte 2) (2011)

Este último ejemplo pertenece a la famosa saga de películas del mago Harry Potter. Se trata de otro beso muy esperado por los fans, el beso entre Hermione y Ron. Después de muchos años de libros y películas, en la última entrega los protagonistas por fin revelan parte de lo que sienten el uno por el otro en un supuesto beso apasionado en una escena de mucha tensión. Pero lo que debería haber sido algo realmente espectacular, acaba siendo un acto más bien soso. La sensación que se lleva el espectador es un “¿tanto tiempo para esto?”. Ni física ni química, nada más se transmite en esa interpretación que un beso forzado entre dos personas que no son más que amigos.  Además, el mismo Rupert Grint confesó que fue una de las peores escenas que recuerda grabar porque se conocen con la actriz desde los nueve años y  para él fue muy surreal sentir como si estuviera besando a su propia hermana.